Día de las Víctimas de los Crímenes de Estado en Colombia

Tras leer el comunicado, cuentos, poemas y cantar canciones, se arrojaron flores al río Ebro en memoria de todas las vícitmas de crímenes de estado en Colombia.

También fotografiamos pies uniéndonos a la campaña del MOVICE: "En M6VIDA con los pies en la tierra" -  Pon a recorrer los caminos de la memoria en Colombia.

COMUNICADO

Día de las Víctimas de Crímenes de Estado en Colombia

Por cuarto año consecutivo nos reunimos este 6 de marzo para conmemorar el día de las víctimas de crímenes de estado en Colombia.

Todos y todas conocemos las dramáticas estadísticas que en cuanto a violaciones de los derechos humanos y crímenes contra la humanidad ostenta el país, en medio de un conflicto interno no reconocido por el Estado, obviado por la Comunidad Internacional y consentido desde nuestro país, y que se prolonga por casi 50 años.

Sólo por ejemplificar esta situación podemos hablar de las miles de ejecuciones extrajudiciales, de los más de 15.000 desparecidos/as, de los cuatro millones de desplazados/as, de los 4.000 integrantes de la Unión Patriótica así como de los periodistas, sindicalistas y jueces/zas asesinados/as. Podemos hablar de las miles de hectáreas de tierra usurpadas a sangre y fuego a los campesinos/as, indígenas y afrodescendientes que aún siendo sus legítimos/as dueños/as no pueden disfrutarlas, trabajarlas ni mucho menos vivir en ellas.

Y también podemos hablar de esa significativa parte de Colombia que se encuentra exiliada. Refugiados/as políticos que hoy viven en países que los acogieron, pero en los que no pueden sentirse seguros/as tal y como lo demuestra el Plan Europa.

Pero hoy no nos convocan los datos, nos convocan las víctimas, con nombre, con vida y con dignidad. Víctimas que tratan de ser acalladas por los victimarios en un claro intento por negar lo vivido y por perpetuar la impunidad. Ni el silencio, ni las decenas de leyes que los sucesivos gobiernos en Colombia promulgaron para exculpar a los victimarios, son la salida y mucho menos la respuesta justa a millones de colombianos y colombianas que viven en medio de una guerra no declarada. Tampoco nosotros podemos mirar a otro lado, viendo cómo tantos intereses políticos, estratégicos, o económicos se consienten, se alimentan y perpetúan en el tiempo con esa total impunidad que algunos tiene como fin, tal y como muestra la nueva ley promovida en el parlamento que pretende eximir a miles de paramilitares de sus culpas, otorgándoles el marco jurídico necesario para conseguirlo.

Por todos ellos/ellas, por las víctimas, en este día tan significativo queremos denunciar de nuevo:

que el actuar del gobierno colombiano, al elaborar una ley de víctimas sin el menor consenso con ellas, desconoce los principios internacionales de Verdad, Justicia y Reparación.

que los grupos paramilitares y sus estructuras no han sido desmovilizadas tal y como pretenden hacernos creer, que las BACRIM (bandas criminales emergente) no son más que la continuación del entramado paramilitar existente.

que la complicidad de las fuerzas de seguridad del Estado, los poderes políticos y económicos del país con estos grupos paramilitares continúa estando vigente, sin ser esclarecida y sin juzgarse.

que continúa la persecución y criminalización de los defensores/as de derechos humanos, sindicalistas, líderes barriales, campesinos/as, desplazados/as y opositores/as políticos.

y que el silencio y apoyo del estado español lo convierte en cómplice de esta barbarie y por ello deberá rendir cuentas.

Con estas flores que arrojamos a este río Ebro queremos rescatar del olvido a tantos/tantas colombianos y colombianas que han sabido poner vida ante tanto horror, que ante el silencio general dan voz a las víctimas, defensores y defensoras de Derechos Humanos que siguen diciendo “no” a tanto atropello y tanta muerte.

Recordamos a las miles de víctimas de los crímenes de estado en Colombia. Y lo hacemos desde las orillas del río Ebro, con la esperanza de que sus aguas, en su correr por el mundo, lleguen a encontrarse con las de los grandes ríos colombianos: Magdalena, Cauca, Cesar, Guatapurí, Atrato, San Juan, Baudó, Sinú… testigos mudos de tantas masacres, dolor y sufrimiento, y así trasmitir nuestro sentido homenaje a las víctimas y nuestro firme compromiso para “recorrer los caminos de la memoria en Colombia” con todos/as ellos/ellas, tal y como hoy solicita el MOVICE.

Colectivo de Solidaridad por la Justicia y Dignidad de los Pueblos, Coliche

Izquierda Unida de La Rioja  - Área Juventud

Organización de Cooperación y Solidaridad Internacional

Logroño, 6 de Marzo de 2011